A Guarda-Calidade

El Espíritu de A Guarda está intimamente relacionado con el mar. Desde siempre la pesca fué una de las principales fuentes de ingresos de sus vecinos por lo que es muy buena idea comenzar a pasear por su puerto, el más meridional de Galicia. En los momentos con mas movimiento, cuando las gamelas vuelven del mar, el puerto se convierte en el corazón de la actividad de la villa. Las cajas de pescado se mueven en todas las direcciones listas para ser enviadas a los mercados, y los pujadores declaman, a toda velocidad, su particular rosario de cifras. Como homenaje a los hombres del mar, A Guarda l cuenta con un monumento al pescador.
El contatco con el mar garantiza en A Guarda una excelente gastronomía, en la que se hace muy buen uso de las capturas que llegan a puerto. Quizá el producto estrella sea la langosta, pero sin olvidar la pescada, el pez espada, la robaliza, etc. A estas hay que añadir las especies de rio como la anguila, la lamprea ó el salmón. Los postres mas tradicionales son los mirabeles, a base de fruta en almíbar y la rosca de yema.
También tenemos el convento de San Benito, hoy utilizado como hotel. En su iglesia todavía se conservan unos interesantes retablos de estilo barroco y el sepulcro de D. Alvaro Ozores y Sotomayor, fundador de convento en 1588.
La iglesia de Santa María de la Asunción fué construida en 1576 sobre los restos de otra muy anterior, cuyo año de construcción se calcula al rededor del siglo X. Aún se conservan algunos elementos (capiteles y piedras) de aquel primitivo templo prerrománico. La que hoy encontramos es de estilo barroco como puede apreciarse en su fachada.
El ayuntamiento de A Guarda es un interesante edificio de estructura cúbica . En las piedras con las que está erigido se encuentran los escudos nobiliarios de familias como los Correa y los Ozores.