Los comuneros de Petán están satisfechos con la alta demanda que esta teniendo su producto, el cerdo celta criado en libertad y alimentado con bellotas de roble y hierbas. Los cerdos pastan en un robledal de 90 hectáreas dividido en varios cercados. Duermen bajo cobertizos de plástico, donde la piara se acurruca para combatir las bajas temperaturas de la época.
La comunidad de montes adquirió 92 ejemplares en septiembre del 2011